Soy anfitriona...Deberán saber que en otra oportunidad ustedes serían mis víctimas pero en esta ocasión solo busco vuestra compañía...Compartir gustos y momentos agradables...Yo los invito a caminar a mi lado en las tinieblas...Yo los invito a entrar...Los guiaré para que vuestros ojos se deleiten ante miles de mundos creados por mágicas manos...Y a veces los dejaré entrar a mi propio mundo que encontrarán en mis palabras... Solo se pide que dejen vuestra huella...Vuestro susurro...Vuestras miradas...En definitiva vuestra presencia para poder existir...Si ustedes están ahí...Yo siempre estaré aquí...Envuelta en tinieblas...
Un saludo muy sincero..

domingo, 13 de noviembre de 2016




Hace tiempo que dejé de preocuparme por lo que piensan y dicen de mí, porque descubrí que la persona de quien más amor y respeto espero es de mi misma. Me he cansado de personas banales y vacías de emociones limpias y hermosas
Ya no quiero en mi camino a los que cortan las palabras con indiferencia a golpe de cobardía y rencor; a los que tiñen mi cielo de pájaros que nunca vuelan y jamás lo harán.
Me sobran halagos que van vestidos de falsas intenciones, de abrazos que son fríos, de amigos que solo tienen el nombre y no el tesoro. De amores que olvidaron la valentía y la pasión en alguna estación sin trenes.
Ya no trato de ser coherente y lógica y dar lo que me piden, de ser tal como esperan los demás, porque ya no me asusta decidir y cambiar, girar mi rumbo y romper el mapa, aunque en el intento me pierda en un país sin nombre.
Hace algún tiempo descubrí quién deseo ser y aún sin haberlo conseguido, me gusta mi sonrisa y el brillo de mis ojos. Sé que mi locura forma parte de mi alma y serme fiel a mi misma es el pasaporte que me lleva a su corazón.
Hace tiempo descubrí que me enamoran las personas auténticas, que no mienten y son generosas. Las que aman de frente y de verdad.
10 novelas eróticas que sí valen la pena (y NO se llaman 50 sombras)

La sensualidad mediática de Las 50 sombras de Grey me tiene harta. Y es que aunque muchos piensen que los revolcones de Anastasia y Christian inauguran la novela cachonda, la literatura erótica de verdad, la perversa y rica, existe DESDE hace siglos. Además, el muy publicitado estreno de la película ya era malo (con sus apenas 11 minutos de sexo, según dicen), pero hacerlo coincidir con San Valentín es el colmo de lo previsible. Para contrarrestar el derroche de lugares comunes propongo este coctelito de lecturas lujuriosas: combina autores internacionales e hispanoamericanos, títulos clásicos y otros más bien recientes, en total 10 ricas opciones de novela erótica. Para que nadie pierda su tiempo con Grey.

1. La Venus de las pieles, Leopold von Sacher-Masoch, Axial (1870)
CUENTA la esclavitud sexual que un hombre establece con Wanda, una mujer alucinantemente fría. La novela está inspirada en las historias verdaderas de sometimiento a las que se expuso el autor, a partir de cuyo apellido se formó la palabra “masoquismo”. Aparecen látigos, disfraces, humillaciones y castigos que disfrutan tanto la “diosa cruel” como su esclavo, feliz de ser maltratado por ella.

2. Las edades de Lulú, Almudena Grandes, Tusquets (1989)
La protagonista, de 15 años, se enreda sexualmente con un amigo de su hermano mayor y se da CUENTA de que le fascina el juego. A partir de ahí se convierte en la eterna niña (aunque tenga 30), insaciable, obsesionada por el sexo. Novela ganadora del Premio La sonrisa vertical, fue llevada al cine por Bigas Luna.

3. La historia del ojo, Georges Bataille, Fontamara (1928)
Escabrosa y a ratos surrealista, narra un VIAJE A España de Simone y Georges, pareja inmoral que se regodea entre semen, sangre y orina. Escrita hace más de 80 años, todavía hoy levanta cejas de la gente decente con frases como: “Su culo representaba una plegaria todopoderosa, a causa de la extrema perfección de sus dos nalgas”.

4. Luna caliente, Mempo Giardinelli, Planeta (2009)
Cuando el médico Ramiro regresa a casa luego de ESTUDIAR en el extranjero conoce a Araceli, una chica muy joven y muy sexual, que lo calienta “desmesuradamente”. Ella lo lleva a disfrutar un placer sin freno pero también aterrador, imparable, desaforado.

5. Lolita, Vladimir Nabokov, Anagrama (1955)
Una adolescente que sin darse CUENTA (o sí) es provocadora y un hombre maduro enamorado de ella protagonizan esta joya de novela, controversial y llena de humor. La pluma de Nabokov regala pasajes COMO: “Después se precipitó a mis brazos impacientes, radiante, abandonada, para acariciarme con sus ojos tiernos, misteriosos, impuros, indiferentes, umbríos… como la más barata de las bellezas baratas”.

6. Las piadosas, Federico Andahazi, Plaza & Janés (1998)
Ubicada a fines del siglo XVIII, aborda las reuniones de escritores notables como Byron y Shelley, pero con un twist perversito: no digo de qué se trata por evitar un odioso spoiler, pero el semen tiene un papel importante en la trama.

7. Historia de O, Pauline Réage, Tusquets (1954)
Una fotógrafa parisina es convertida por su amante en un objeto de placer sadomasoquista y compartida por él con varios hombres. Cadenas y azotes son algunos juguetes de ese intercambio arriesgado aceptado por ambos, en el que se alternan el dolor y el placer.

8. Inmaculada o los placeres de la inocencia, Juan García Ponce, Fondo de Cultura Económica (1989)
Escrita por el genial autor mexicano, pone el foco en una joven intensa que muestra la vocación de obedecer. Cuando DESCUBRE su sexualidad desbordada, Inmaculada se dedica a perseguir el orgasmo como la única certeza de estar viva: “Eso era lo que ella había querido siempre, estar en un automóvil con alguien cuyo aspecto no le interesaba […] que le resultaba un desconocido, tener la blusa abierta y un pecho fuera”.

9. Justine o Los infortunios de la virtud, Marqués de Sade, Valdemar (1791)
Escenas de violencia sexual, seducciones hábiles, libertinaje y excesos pueblan las páginas de esta novela francesa que CUENTA cómo Justine, quien quiere conservar la virtud, sólo encuentra incitaciones al vicio y la perversión.

10. Dorada, David Miklos, Tusquets (2014)
Por carta, una desconocida invita al protagonista a conocer sus “pechos exagerados”. Así VIAJA A LA ciudad de La Dorada, cuyas mujeres se dejan hacer “cualquier cosa”. Ahí vive una experiencia de lujuria y alucinación, para luego visitar Aguafuerte, llena de chicas siempre listas y dispuestas a jugar.
Bonus: La PASIÓN turca, Antonio GALA, Planeta (1993)
En una VIAJE A Turquía, Desideria conoce a Yamam: por vivir con él una pasión avasalladora se olvida de su marido, su país y su vida. Poco a poco se ve revelando la pesadilla de esa relación en la que el cuerpo y el deseo son el eje.
(Originalmente publicado en mi blog Deli(b)rios, dentro del sitio web de la revista SoHo).

Ceremonia de las Rosas

La D/s esta llena de tradiciones y ceremonias preciosas, una de las mas significativas y vistosas es el "ritual de unión" ...